Actualmente, las empresas utilizan la computación en la nube para el almacenamiento de los documentos, archivos corporativos, base de datos y están moviendo el entorno del usuario directamente a la nube. Así aparece la infraestructura de escritorios virtuales, también llamado VDI por sus siglas en inglés (Virtual Desktop Interface).
VDI que es la práctica de hospedar un sistema operativo para computadoras de escritorio en una máquina virtual (VM) que opera desde un servidor centralizado, por ello es un paso más hacia la convergencia en la nube, donde en lugar de llevar al usuario el software ejecutado en la nube sobre un sistema operativo preexistente, llevamos la totalidad del entorno del usuario directamente a la nube.
VDI es una variación del modelo de computación cliente/servidor, a veces conocido como computación basada en servidores. El término fue acuñado por VMware.
Según la Wikipedia, los entornos de escritorio virtual aportan cinco beneficios importantes a cualquier usuario:
1. Aumentan la seguridad en escritorios y disminuye los costes de soporte, dado que la administración del entorno pasa a ser responsabilidad del proveedor de servicio o la empresa.
2. Reducen los costes generales de hardware, ya que no necesitamos preocuparnos del dispositivo desde el que accedemos al mismo, siendo el proceso, la memoria y el almacenamiento responsabilidad del proveedor.
3. Aseguran la continuidad de negocio, pues disponemos de tecnologías redundantes que hacen que un fallo hardware no afecte a la capacidad de trabajo, y por tanto, a la productividad del empleado.
4. Presentan una alternativa ecológica, pues centralizamos los recursos en equipos más ecológicos que los PC.
5. Mejoran la seguridad de los datos, al estar en un repositorio compartido.
Con la adopción del cómputo en la nube por parte de las empresas y la proliferación de los móviles, se puede implantar políticas de BYOD (Bring Your Own Device, o en castellano, Trae Tu Propio Dispositivo), ya que el equipo desde el cuál se trabaja en este tipo de entornos deja de ser un problema, pues el software, el sistema operativo y la seguridad dejan de estar en el dispositivo de usuario final y pasan a estar en un entorno de escritorio virtual donde tenemos todo debidamente administrado.
El BOYD consiste en que las empresas permiten a los trabajadores llevar sus dispositivos portátiles personales, para llevar a cabo tareas del trabajo y conectarse a la red corporativa, esta optimización de recursos permite ahorros importantes en las empresas, pero también genera ahorros importantes en el usuario, que disfruta de un servicio totalmente gestionado y no debe preocuparse de nada.
Aun cuando las empresas no pueden controlar la fuga de información por un descuido del empleado, las compañías permiten al empleado el acceso de las aplicaciones empresariales corporativas o al correo electrónico desde su dispositivo personal. Al ofrecer esta flexibilidad, aumenta la productividad y satisfacción del empleado, pues aprovecha las últimas tecnologías móviles disponibles en el mercado.
Cuando un empleado utiliza los dispositivos proporcionados por la compañía, las empresas siempre tendrán la certeza de que el equipo estará en la oficina y no existe el riesgo de que el trabajador lo pierda o lo olvide. Pese a estas preocupaciones por parte del patrón, al empleado siempre le gusta trabajar en sus propios dispositivos y resultan más productivos. Esto lo saben las organizaciones, y gracias al cómputo en la nube, en caso de pérdida de un equipo ya sea por robo o falla, el empleado simplemente puede empezar a trabajar en otra computadora, con todos los datos vitales almacenados en la nube.
En los escritorios virtuales la información no se almacena en el equipo del trabajador, el empleado únicamente necesita indicar su nombre de usuario y contraseña para acceder a su ambiente de trabajo. El empleador siempre tendrá la certeza de poder monitorear las acciones del empleado, o también, cuando el empleado sea reasignado a una nueva posición, no se lleve documentación del proyecto con él.
Los servicios VDI pueden adquirirse directamente en la nube, y son varios los proveedores que lo ofrecen tanto a particulares como a empresas a través de Internet, pero también son configurables en nubes privadas para que las empresas elijan donde desean alojar esta información y controlen los recursos que desean desplegar. Además, existen muchos proveedores que permiten desplegar este tipo de entornos en nubes privadas, y que pueden entregar el servicio en modo pago por uso al emplear su infraestructura, plataforma y software pre-desplegado para consumo privativo de cada cliente, o desplegando infraestructura, servicio y plataforma ad-hoc para cada proyecto.
Esto le permite al empleado trabajar desde su propio equipo y gracias al cómputo en la nube, siempre se aumentará la productividad y satisfacción del trabajador, se aprovechan las últimas tecnologías móviles disponibles, las empresas reducen el gasto en equipo de cómputo y software de control. También, disminuyen los gastos en plan de datos por un proveedor de telecomunicaciones en algunos casos.
Al adoptar las últimas tendencias de la tecnología de BYOD y el cómputo en la nube, tanto las empresas como el empleado de se ven beneficiados.
Referencias Bibliográficas:
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